Ser informado sobre la anestesia general ayudará a evitar que las madres sean sorprendidas en el improbable caso de que sea necesario. La anestesia general provoca una pérdida total tanto de la sensación como de la conciencia.
Raramente se usa para el parto porque la participación consciente de la madre se considera muy importante para un parto seguro y eficiente.
Las siguientes son situaciones RARAS en las que un proveedor de atención médica podría decidir administrar anestesia general:
- cesárea cuando se requiere una pérdida rápida de la sensibilidad
-En casos raros donde no se puede colocar un bloqueo epidural o espinal
-Cuando la mujer no puede tolerar un anestésico regional
-Cuando los beneficios de la anestesia general superan claramente los riesgos
¿Cómo se da?
Paso 1: un relajante muscular, como la succinilcolina, se administra por vía intravenosa. Esto rápidamente hace que la mujer se sienta muy relajada y semiconsciente.
Paso 2: Luego inhala un gas llamado óxido nitroso que causa la pérdida total de la conciencia. Se inserta un tubo en la tráquea de la mujer para mantener abiertas las vías respiratorias y permitir la administración del anestésico. Debido a que una persona inconsciente puede vomitar, el tubo ayuda a prevenir la posibilidad de inhalar el material vomitado.
¿Cuáles son los riesgos para la madre y el bebé?
La investigación indica fuertemente que la tasa de muerte materna debido a la anestesia general puede ser al menos el doble de la tasa de mortalidad de la anestesia regional. La causa principal de muerte materna por anestesia general es una dificultad con el manejo de la vía aérea.
La mayor preocupación para el bebé es la disminución del flujo sanguíneo uterino y la depresión neonatal. Los efectos neonatales prolongados han llevado a la eliminación virtual del uso de anestesia general durante el trabajo de parto y el parto.