La quinta enfermedad es una infección contagiosa causada por el parvovirus humano B19 y se propaga a través de la tos, los estornudos o los fluidos corporales. ¿Qué tan común es la quinta enfermedad durante el embarazo? La mayoría de las mujeres que contraen la Quinta enfermedad durante el embarazo tendrán bebés sanos.
Sin embargo, como con cualquier enfermedad, es importante comprender los signos, síntomas, opciones de tratamiento y los posibles efectos de la enfermedad tanto en la madre como en el bebé. A continuación encontrará los pasos para tratar y prevenir la Quinta Enfermedad durante el embarazo.
¿Cuáles son los síntomas de la quinta enfermedad durante el embarazo?
Los signos y síntomas de la quinta enfermedad durante el embarazo pueden incluir:
-Dolor en las articulaciones que puede durar varios días o semanas.
-Fiebre
-Dolor de cabeza
-Dolor de garganta
-Erupción roja de encaje en las mejillas, piernas, vientre y cuello.
-Por lo general, la erupción roja se presenta en niños, mientras que los otros síntomas se encuentran con mayor frecuencia en adultos. Los síntomas de la Quinta enfermedad son consistentes en todos los adultos, independientemente del estado de embarazo.
¿Cómo se diagnostica la quinta enfermedad durante el embarazo?
Si sospecha que ha estado expuesto a la Quinta enfermedad pero no tiene una erupción cutánea, será necesario realizar un análisis de sangre para detectar una infección. Cuando la Quinta enfermedad se contrae durante el embarazo, la principal fuente de preocupación es su hijo por nacer.
En muchos casos, su proveedor de atención médica le sugerirá ultrasonidos adicionales durante 8 a 12 semanas para observar posibles complicaciones del embarazo. Si el ultrasonido muestra signos de la enfermedad en su bebé, su profesional de la salud puede recomendarle una amniocentesis o cordocentesis para confirmar la infección y su gravedad.
Posibles complicaciones de la quinta enfermedad durante el embarazo
Aunque es raro, aproximadamente el 5% de las veces, la quinta enfermedad puede causar complicaciones durante el embarazo. La complicación número uno de la Quinta enfermedad para el feto es la anemia. La anemia se caracteriza por la falta de glóbulos rojos sanos.
Los glóbulos rojos son importantes para el desarrollo de su bebé, ya que transportan oxígeno al cuerpo. En la mayoría de los casos, la anemia no es grave y simplemente se puede controlar por problemas de salud después del nacimiento. Sin embargo, si el bebé tiene anemia severa, existe el riesgo de desarrollar Hydrops.
Hydrops es una acumulación de líquido en el cuerpo de su bebé. El desarrollo de Hydrops es grave, ya que puede provocar insuficiencia cardíaca congestiva y posiblemente la muerte. Algunos profesionales de la salud eligen combatir Hydrops realizando una transfusión de sangre mientras el bebé está en el útero. Si su bebé tiene Hydrops durante el tercer trimestre, es posible que necesite que lo induzcan a dar a luz temprano.
¿Cómo se trata la quinta enfermedad durante el embarazo?
Recuerde que la Quinta Enfermedad durante el embarazo ocurre en aproximadamente 1 de cada 400 casos. De esos casos, solo el 5% experimentó una complicación de preocupación. Por lo general, la Quinta enfermedad es leve y se resolverá por sí sola sin ningún tratamiento en niños y adultos sanos. Los bebés son monitoreados para detectar signos de infección y posible anemia. En los casos poco frecuentes cuando la afección empeora, su proveedor de atención médica puede tratar a su bebé con transfusión de sangre mientras está en el útero.
¿Cómo se previene la quinta enfermedad durante el embarazo?
Lavarse las manos puede prevenir la quinta enfermedad durante el embarazo.
Actualmente no existe una vacuna contra la Quinta Enfermedad, por lo que el mejor tratamiento o acción contra la Quinta Enfermedad es la prevención.
Algunas formas de evitar que se infecte incluyen:
-Lavado regular de manos con agua caliente y jabón.
-Eliminación cuidadosa de pañuelos u otros artículos que transportan fluidos corporales
-Cubrirse la boca al estornudar, toser, etc.
-Exposición limitada a quienes tienen la quinta enfermedad.
La buena noticia es que los pasos que toma para evitar la Quinta Enfermedad también lo protegen contra otras bacterias, virus e infecciones.